EL TESTIMONIO DE JUANJERET |
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LAS PROMESAS DE JESUS |
UN TESTIMONIO DE LA VIDA REAL PARA LA HUMANIDAD
Yo, Juán A. Guzmán G. nacido en Caracas Venezuela; y actualmente viviendo en Alemania; quiero relatar algunos acontecimientos
que en el peregrinar a través de mi vida, me han sucedido. Desde hace 18 años comencé a leer la Biblia, motivado por mi amada
esposa Beatriz; conocí a mi Señor Jesús, El Cristo; y fui bautizado en las aguas, en una Iglesia Evangélica en Caracas. No
me he interesado por ser Pastor, Teólogo o Escritor, sino solamente un simple obrero de mi Señor. Pero mi testimonio; va dirigido
a todos los pastores de las iglesias cristianas, que predican la doctrina de Dios, de su Hijo y del Espíritu Santo, a todos
mis hermanos en Cristo y a los que están por conocer a mi Señor.
Primero: hermanos, la palabra que ha sido escrita por aquellos hombres, después que mi Señor, fue ascendido al cielo,
ya hace 2.003 años, dice que no nos ha dejado huérfanos; por que el mismo Señor, nos dice en el Evangelio de Juan 14:18, "No
os dejaré huérfanos; vendré a vosotros." El es nuestro verdadero Padre, y nos mandó en el día de Pentecostés, un Consolador;
en el libro de los Hechos 2:4 dice; "y fueron todos llenos del Espíritu Santo"; si Nuestro Señor nos mando el Consolador,
el Espíritu Santo, es él quien ha trabajado a través de los siglos hasta hoy, moviendo los corazones de aquellos hombres,
que han sido utilizados por su poder, para prepararnos todo, con lujo de detalles, desde lo mas mínimo en los acontecimientos
desde la fundación del mundo, y nos a hecho un libro, el cual tenemos actualmente, "LA BIBLIA". Sus escritos nos
sirven para saber en donde estamos parados en este mundo. Amados hermanos: quisiera compartir con ustedes el texto de Segunda
de Timoteo 3:16-17, y que mediten sobre estos dos versículos por favor. Sin embargo, el mismo Señor nos dice, antes de ascender
o los cielos, que estará con nosotros, todos los días de nuestro vida, Mateo 28:20, o sea, queridos hermanos, que no estamos
solos en este mundo, porque tenemos al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo, que siempre están pendientes de nosotros las 24
horas del día.
Les he escrito todo esto, para que no vean la Palabra de Dios, como una fantasía o cuento de cartones, o como las fantasías
que nos muestran cada día los medios de comunicación: radio y t.v. no digo que son malos los medios, ni los critico, pero
el diablo los ha utilizado para desviarnos o perturbarnos y confundirnos; para que no veamos con claridad, la obra que mi
Señor Jesús, por medio de su Santo Espíritu, viene haciendo a través de los siglos, con los hombres de este mundo, para su
salvación, por medio de mi Señor Jesucristo.
Por eso: hermanos, insisto, en que no nos dejemos arrastrar por todo lo que nos ofrece este mundo, y que recordemos lo
que dice el Apóstol Pedro en su segunda carta en el Capítulo 3 : 10, "Que por la palabra de Dios está reservado para
el mundo el fuego". Por lo cual, no se dejen llevar por todo viento de doctrina, que sopla y que va de un lado a otro,
si no permanezcan firmes en una sola doctrina verdadera, la que ha venido de arriba, de Dios, por favor lean en el Evangelio
de Juán 7: 16-17.
He querido escribir parte de la Palabra de Dios, y citar algunos versículos para que así puedan comprender mejor mi testimonio,
el cual quiero compartir con todos y les aclaro que no busco dinero, ni honra, ni glorias, ni ningún puesto grande dentro
de una Iglesia, sino, el reforzarlos en la fe de mi Señor El Cristo y mostrarles que El es real y verdadero.
Ahora les comento lo que pasó, en un momento de mi vida; en una tarde de un día, entre las 5pm. Y 7pm, no me acuerdo muy
bien, ya que han pasado como 6 años, pero fue así: " Una vez, estando yo orando con mi esposa a mi lado, como era nuestra
costumbre juntos en casa, ella me dijo: Juan, vamos a orar al Señor por el problema que tenemos, una vez mas para que nos
ayude; y le dije: sí; oramos, pero dentro de mi, pensaba que era perder el tiempo, pero para no ofender a mi esposa le dije
si oramos; en el momento cuando nos arrodillamos en el piso de la habitación, donde dormíamos en el apartamento, ella comenzó
la oración, ella tenia su Biblia, y yo la mía, y al terminar ella la oración, me tocó a mi orar, y comencé diciendo: Señor,
mi Dios, he aquí tu Santa Palabra frente de mí, Señor; si Tú, tú Hijo Jesús y el Espíritu Santo son uno como dice tu Palabra
"en primera de Juan 5:7, por favor lean, " si es verdad que existen, como dice este libro, o sea la Biblia en la
cual, yo he creído por la Fe, pero es tan fuerte mi angustia que llevo por dentro de mi, Señor, que a veces tambaleo, y dudo
de la Fe en mi Señor Jesús, y por tanto le doy parte de razón al Apóstol Tomas, "lean por favor Juán 20:24 -29 "
seguí diciendo en la oración "hay que ver para creer Señor.
Cuando yo dije en la oración, esta expresión:"Hay que ver para creer", en mi oído izquierdo, escuché una voz
como de mando, muy fuerte, voz, física "humana" y como dice la Biblia como el estruendo de muchas aguas, les digo
que el miedo, y el terror, entraron en mi alma, pero cuando yo alcé mi mirada, para ver quien era el que me hablaba; la misma
voz me dijo: "Sube aquí" y sentí, que el que me había hablado, estaba molesto, por lo que dije, por la entonación
de su voz.
En ese momento la misma voz, me saco del cuerpo. Cómo? No lo sé; pero si sé, que en breves segundos, yo estaba fuera de
mi cuerpo, y la misma voz me elevó hacia el cielo, en el cual, yo pienso, que como yo estaba con mi esposa orando, dentro
de la habitación del apartamento; y que me hizo atravesar las paredes, y el techo del edificio donde vivíamos; y la misma
voz me sostuvo en el cielo, y me mostró delante de mí una puerta angosta en los cielos. En que parte de los cielos? No lo
sé, pero la ví, y delante hacia el lado derecho de la puerta, en las nubes, observé a una persona sentada en las nubes, era
como la figura de un Hombre, vestido con un mantel blanco, y sus cabellos eran largos hasta los hombros, con bigotes y barbas,
y al lado de sus orejas unos rizos, como se los hacen los judíos, no pude mirarlo muy bien a su rostro. Porque no? No lo se.
Después vi hacia adentro por la puerta, un camino de tierra estrecho; y hacia el lado izquierdo al fondo, ví una montaña no
muy elevada "Creo que era el Monte Sion que nombran los Salmos" y en la cima de la montaña, un monte bellísimo,
y sus cielos hermosos, yo quede maravillado, por que decía dentro de mí, como es esto. Una montaña en los cielos? Y después
la misma voz, me regreso a mi cuerpo, y cuando abrí mis ojos nuevamente, en mi cuerpo, dije: Amen Señor.
Y, me voltee hacia mí dulce esposa, para saber si ella también había oído y visto lo que yo oí y vi; pero no, yo estaba
tan impresionado, que, como mi esposa no me hizo ningún comentario, ni me pregunto nada, me quede callado, pensando en todo
lo que me había acontecido; pero yo, en ningún momento le comente a mi esposa nada, por que pensaría que me estaría volviendo
loco o algo semejante, y después de pasados algunos días, fue que reaccione, y me acuerdo que durante esos días, mi suegra
Berti me decía: "Que tienes en la cara?" Porque veía mi rostro como de un ángel, no sé, por que me lo decía, y en
esos días le comenté todo a mi bella esposa Beatriz; mas yo le sacaba el cuerpo a ella para no orar, por el terror y el miedo
a que me fuese a pasar de nuevo, pero no; seguí orando con mas entusiasmo, y con toda la Fe del mundo, y el gozo que me había
dado la voz de mi Señor. Fue tan grande esto, dentro de mi.
Pero, me pongo a veces triste, por que el Señor dice en su palabra en el Evangelio de Juan Capitulo 20:29; "porque
mayor y mas bienaventurados son los que no vieron y creyeron.
Y, por esto me pongo triste, y pido perdón, y me arrepiento, por haber dicho, que hay que ver para creer, pido perdón,
y se, que El en su infinita bondad me ama y me ha perdonado.
"Te pido perdón Padre Santo; porque te ofendí, tu eres real y tus palabras son Espíritu y Verdad, si Padre tu santidad,
ho mi Señor, convienen a tu casa Señor, gracias Señor por tu misericordia para conmigo. Amen.
Este testimonio, es real en mi vida, y lo quiero dedicar a todos mis hermanos en Cristo, a los que son débiles en la FE,
y que a veces dudan de la veracidad de Dios Padre, Dios Hijo, y Dios Espíritu Santo, como me paso a mi.
Procuremos hermanos, pedir al Padre siempre, que nos de fuerzas para soportar las pruebas de fuego, que siempre el cristiano
tiene que soportar, y apeguémonos si es posible las 24 horas del día a su Santa Palabra, para apagar los dardos del enemigo.
Y a todos los pastores, y a los hermanos en Cristo y a los que están por conocer a mi Señor Jesús de Nazaret, para que
su amor, paciencia, humildad, mansedumbre y muchos otros frutos que el Espíritu Santo nos ayudará a desarrollar a través de
nuestra peregrinación en esta vida; y para el gran día del Señor en su manifestación al mundo, como está escrito en el último
capitulo del libro del Apocalipsis. "Si ven, Señor Jesús". He hecho con mi esposa Beatriz; un dibujo mas detallado,
de lo que mis ojos vieron en el espíritu; el dibujo lo pueden apreciar en la parte de arriba al comienzo del texto. Y al preocuparnos
por los problemas, recordemos hermanos que el mismo Señor, nos dice en el Evangelio de Mateo 6:25-34; EL nos ayuda en nuestras
debilidades.
Hermanos míos en Cristo, siempre hay que tener paciencia, para que El Señor nos conteste nuestras oraciones, acordémonos
que nosotros no somos los únicos que estamos en el mundo.
Si mi Señor Jesús, siendo el hijo de Dios, nos ha dado ejemplo de su paciencia; desde que El ascendió a los cielos hace
2.003 años, El se somete a la voluntad del Padre, que es Padre de todas las familias del mundo, para que todos sean salvos,
en el nombre de mi Señor Jesús el Cristo y crean en El. Sí amen.
Este testimonio de mi vida real, que he escrito, y dibujado, sea para que todos aquellos, que lo vean, lean y crean lo
que he dicho y dibujado; será multiplicada su Fe y la bendición de Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu Santo, sea con todos
vosotros. Y sea la alabanza, la honra, la gloria, el poder las bendiciones, la sabiduría, la fortaleza y las acciones de gracias,
para mi Señor Jesucristo. Amen.
Mientras que mi Señor, me dé todavía de su aliento, no solamente daré este testimonio, sino muchos mas que El me ha mostrado,
pero los escribiré a su debido tiempo.
Que la bendición de Dios sea sobre todos. Amen. Me despido con la firma de mi nuevo nombre que se me dio, en el Señor.
< ATENTAMENTE;JERET EMAIL:juanjeret@hotmail.com
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